El Govern modificará en las próximas semanas las condiciones de la concesión de los autobuses interurbanos de Mallorca para incrementar las frecuencias y hacer frente al inteso aumento de la demanda que ha sufrido el transporte público en la Isla en los últimos meses. La Conselleria de Mobilitat tiene previsto incrementar el presupuesto de las concesiones hasta los 580 millones de euros entre este año y 2039. Supone un aumento de la cuantía de cerca de 150 millones de euros que se espera sume un 50 por ciento la oferta de transporte en bus.
El objetivo de la medida es permitir aumentar el número de vehículos y con él, el de frecuencias, rutas y horarios. El departamento prevé que el incremento en el presupuesto supondrá la incorporación de 27 autobuses a la flota hasta llegara a los 257 en total. De ese número, las bases incorporarán que 21 tienen que ser nuevos y el resto tener una antigüedad de entre cuatro y ocho años. El Consell de Govern tendrá que aprobar una autorización de aumento del gasto plurianual en el concurso, que no se modifica desde febrero de 2023. En la partida se incluyen quince millones que se incorporaron entonces, además de la reducción de dos millones que se llevó a cabo durante el periodo de pandemia y se sumarán otros 131 más adicionales.
Además de la incorporación de los nuevos autobuses, los cambios en los contratos de las concesiones implicarán multiplicar el kilometraje que incluyen las bases. Así, la previsión del área de Mobilitat del Govern es que aumente un cincuenta por ciento la oferta de transporte interurbano en autobús y que de los 6,5 millones de kilómetros que se contemplaban en la licitación inicial se pase a los 25 millones. Sobre las rutas que se llevan a cabo ahora mismo, la subida del kilometraje será de algo más de ocho millones.
Ahora mismo, el Consorcio de Transportes de Mallorca dispone de 71 líneas interurbanas. En los úlitmos meses el incremento de viajeros ha sido constante y con ellas se han producido numerosas quejas por parte de los usuarios. Parte del incremento en la demanda coincide con la gratuidad del transporte público, que se empezó a aplicar en el último cuatrimestre de 2022 y continuó vigente durante todo el año pasado. La medida se extenderá durante todo este 2024 y ha mantenido autobuses llenos tanto en la TIB con en las líneas locales que están gestionadas por los ayuntamientos.
El crecimiento en la demanda ya llevó que para la temporada de este verano se tuvieran que incrementar frecuencias en un total de 24 líneas de bus, se retomó el servicio en 16 líneas y se incorporó una nueva línea (131) a la Serra de Tramuntana, entre Santa Ponça, Banyalbufar y la Granja de Esporles. Durante la temporada de invierno (1 de noviembre-21 de marzo), la red TIB se reforzó con un incremento de la oferta en 27 líneas.
Aunque esos refuerzos hayan aliviado algo la tensión en algunas líneas, la demanda constante y la imagen de autobuses repletos llevará a la aprobación de las modificaciones de los contratos que, fuentes del Govern indican que se llevarán a cabo en las próximas semanas para que entren en vigor lo antes posibles y se puedan incorporar los cambios. La intención es que estos cambios se extiendan durante los próximos seis años, hasta 2030.